El plan de empresa es necesario, porque entre otras cosas:
- Ayuda a ordenar ideas.
- Sirve para planificar y pensar anticipadamente en el nuevo negocio, para así prevenir dónde puede surgir problemas y tener preparadas alternativas.
- Da una visión global del proyecto y sirve de guía para cada fase del proceso de creación.
- Instrumento de autoevaluación.
- Reduce considerablemente el riesgo de fracaso.
- Herramienta de formación.
- Determina oportunidades de negocio y los mercado de interes mas prometedores para la empresa.
- Crea un marco de comunicación y venta.
- Permite analizar los costes y la rentabilidad.
Si no me equivoco, la mayoría de empresas que nacen empiezan por el plan de empresa. Por los puntos antes comentados y, sobretodo, para defender el proyecto a la hora de buscar financiación e inversores. Si se piensa detenidamente, no cuesta darse cuenta que cualquier negocio que empiece necesita capital -capital que normalmente el emprendedor no dispone-, ya sea para alquilar un local y comprar el mobiliario, pasando por la compra de máquinas, hasta la contratación de personal.
En nuestro caso no sucede así. Nacemos como una puntocom. La inversión inicial para la puesta en marcha es mínima. De hecho, nuestros únicos gastos son el hosting y el alquiler de un lugar de trabajo. Y el alquiler es por el factor psicológico de tener un lugar donde trabajar juntos que consideramos importante, porque sino desde nuestras casas también habría sido posible.
Quitando el factor económico, en su momento no empezamos eventuo por el plan de empresa -aparte de no tener idea de qué era ni de cómo se hacía- muy probablemente porque no teníamos una idea clara de lo que tenía que ser eventuo. Sí que sabíamos que iba a ser una página social de eventos, y disponemos de mucha documentación sobre ello, pero nos faltaba saber qué hacía falta, qué sobraba, qué podría funcionar, etc. Y, como todo negocio, cuáles serían la fuentes de ingresos. Cierto es que el plan de empresa te ayuda a encontrar estas respuestas.
Pero el hecho que empezásemos con el desarrollo del producto, nos ha dado mucha libertad a la hora de crear, probar y errar, consiguiendo así un producto más sólido y definido. Además, a lo largo del desarrollo van surgiendo nuevas ideas, que se van implementando, enriqueciendo así el resultado final. Y en paralelo hemos tenido alguna que otra reunión con Joan Pinyol, del equipo de DexmaTech, quien nos ha orientado en los aspectos de enfoque del negocio para conseguir beneficios. Pensábamos que viviríamos de publicidad, ¡qué inocentes!.
Lo que está claro es que el plan de empresa se ha de hacer antes o después, aunque haya casos en que no sea tan necesario desde un principio. Contiene aspectos tan importantes pero tan desconocidos por la mayoría como un plan de Marketing -sólo anunciarse en AddWords no sirve- o el plan Económico-financiero -tendón de Aquiles de las startups-. Por suerte existen organizaciones como el Programa Innova y el Barcelona Activa que realizan, entre otras cosas, cursos para la elaboración del plan de empresa. Ahí estaremos.
2 comments:
animo champions! poc a poc and do not stop :)
Buenas reflexiones sobre el inicio de una start-up. Ojala os siga yendo bien.
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